Hace tiempo que quería escribir sobre Adam Silver y las
constantes modificaciones de la NBA en los últimos años. Nadie duda de la intención
pero no hay un pase libre para hacer cualquier cosa.
En primer lugar, quiero aclarar que no voy a gastar palabras
en criticar más de la cuenta a los que mandan en la liga. Esto simplemente es
una opinión sobre ciertas ideas, no contra las personas.
Bueno, ¿por dónde arrancar? la lista es larga. No voy a
detallar cada uno de los planes de esta gestión pero sí al fondo de los mismos.
No cabe la menor duda que Silver asumió en 2014 con los manos llenas de
propuestas, ya sean buenas o malas, no vino a atornillarse en la silla.
Pese a que el espíritu es notable, hay cosas que requieren un
proceso de adaptación. No se puede aplicar un shock de medidas de la nada tras
varios años de estancamiento con Stern. Uno a veces se pregunta ¿cómo trabajaron
tanto tiempo juntos? eran como el agua y el aceite.
Vamos al grano, el planteo de cambiar prácticamente toda la
forma de disputa de la temporada regular y los playoffs. Si me siguen en
Twitter, sabrán la sorpresa que me causó leer todos los puntos del borrador. Es
como si agarraran la historia, la hicieran bolita de papel y la tiraran.
Me imagino que alguna vez escucharon esa enseñanza de "una
cosa es tener las cosas en la cabeza y otra llevarlas a cabo en la realidad",
ese es el gran problema que veo. Varias de las propuestas son tan complejas que
ni siquiera se entienden con facilidad. Por más vueltas que se den, esto sigue
siendo deporte, simplemente básquetbol.
Cada día estoy más convencido que Silver quiere despegarse
de la administración de Stern. No soporta estar a la sombra y ser "el que
continuó el legado". Prefiere escribir su propia historia y tener su
reconocimiento con nombre y apellido.
Tal vez soy un "purista conservador" pero amo
tanto la NBA que me costaría una barbaridad que el formato modifique para
siempre el ritmo competitivo y las estadísticas, tanto de jugadores como equipos.
Por ejemplo, la mayoría de las temporadas están basadas en 82 partidos y cuatro
rondas de playoffs, pero esto se reduciría bastante con los nuevos cambios.
Tampoco soy necio. Si esta liga es inevitable, la tendré que
aceptar, no me va a quedar otra, pero al menos que se den pasos cortos y
firmes, no largos e inestables. La gente no es especialista en muchísimas
reglas, lo que menos quiero es que estemos en pleno año y haya personas que se
pregunten cómo se define el título, sería una vergüenza.
Obviamente, no me podía olvidar del All Star. Pónganse una
mano en el corazón y díganme si entendieron el revuelo que se armó para el
partido. Personalmente, todavía no capto absolutamente nada sobre el último
cuarto. Supongo que dejaré que jueguen y la TV explique.
En fin, hace rato que quería hacer un descargo sobre estos
temas porque siento que hay muchas personas que opinan exactamente igual. Me
parece bárbaro que la cúpula de la NBA no se duerma en los laureles, pero que
tampoco olviden que la gracia de todo esto es ver una pelota naranja entrando
en un aro. No hay necesidad de complicarla.
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